Chevalier. Texto publicado en la columna «Canicas», del diario «La tribuna de Cuenca», el lunes día 02 de octubre de 2023

chevalier

Chevalier. Texto publicado en la columna «Canicas», del diario «La tribuna de Cuenca», el lunes día 02 de octubre de 2023

El viaje se avecina largo y pesado. A los 15 minutos, enclaustrado entre dos viajeros que me agobian a diestro y siniestro, mis posaderas empiezan a resentirse a modo de aperitivo indigesto de lo que las próximas 14 horas acrecentarán. Quién me mandaría meterme en estos tinglados. Durante la comida que pronto nos sirven, más abundante de lo habitual e inesperada en los tiempos actuales, resignado, tomo una pastilla, ilusionado con que seré capaz de dormirme y así algo positivo tendrá al menos este tránsito intercontinental. ¿Resultado? Prácticamente nulo; media hora escasa es el tiempo que consigo desconectar. Además, el trasero me duele como no recuerdo que haya ocurrido nunca antes.

Harto, sobre todo de estar yo mismo saturado por la situación, hurgo en la pantalla que tengo frente a mí y, tras intentar escuchar algo de música, no encuentro camino que me ayude a salir del hartazgo acumulado y, sobre todo, del que está por venir. Decido cambiar de tarea. En el menú busco Películas y encuentro una con un título poco explícito, Chevalier, que más bien me echa inicialmente para atrás. A punto de abandonar la pantalla, de respabilón descubro que el actor mulato que sale en la carátula sujeta con una mano el mástil de un instrumento. ¿Violín, viola,…? Entro en la sinopsis y definitivamente decido verla, a pesar de mi rechazo habitual —manías mías; lo sé—, a visionar películas en un vuelo. Al poco de empezar a verla, me engancha; a los 3 minutos sé que hacerlo será lo mejor que me deparará este pesadísimo viaje; a los 10 se acrecienta de manera desorbitada mi deseo de aterrizar de una vez para averiguar en qué medida el personaje protagonista de la película —Joseph Bologne—, así como lo que de él se cuenta, es real y qué es ficción.

Ya en tierra, mis dudas son resueltas y mi estado de ánimo encuentra un difícilmente descriptible estado de ánimo. Por una parte, si fuera posible daría saltos de alegría por tener los pies ya en tierra firme y las nalgas en vertical; por otra, saciada mi curiosidad, se apodera de mí la desazón propia de quien, como yo, piensa que el ser humano es el ser vivo más cruel que existe consigo mismo estando siempre dispuesto a hacer daño. Odio humanum.

Chevalier. Texto publicado en la columna «Canicas», del diario «La tribuna de Cuenca», el lunes día 02 de octubre de 2023

LA TRIBUNA DE CUENCA

Chevalier. Texto publicado en la columna «Canicas», del diario «La tribuna de Cuenca», el lunes día 02 de octubre de 2023